Activistas arrojan sopa sobre la Mona Lisa en el Louvre

En un acto sorprendente de protesta, activistas pertenecientes al grupo de resistencia civil "Riposte Alimentaire" llevaron a cabo una manifestación en el Museo del Louvre en París. La icónica Mona Lisa fue el blanco de la acción, cuando las activistas arrojaron sopa sobre la obra maestra, desatando asombro y controversia en el lugar.

Afortunadamente, la Mona Lisa no sufrió daños gracias al cristal protector que resguarda la obra. El acto, que inicialmente parecía un atentado contra uno de los tesoros artísticos más preciados, tenía un propósito más allá de lo visual. Riposte Alimentaire, un grupo dedicado a la resistencia civil en busca de garantizar la seguridad alimentaria, utilizó la emblemática obra de Leonardo da Vinci como escenario para llamar la atención sobre su causa.

Ell video que circula en redes y que ya es tendencia mundial se escucha un sonoro “¡ohhhhhh!” al momento en que las activistas arrojan la sopa sobre la Mona Lisa en el Museo de Louvre.

La acción ha generado un debate sobre los límites de la protesta y el uso de símbolos culturales en la lucha por diversas causas. Las autoridades del museo y la policía han detenido a las activistas involucradas, quienes ahora enfrentarán posibles cargos por su intrusión y acto de vandalismo simbólico.

El Museo del Louvre, uno de los más visitados del mundo, no ha emitido comentarios sobre el incidente hasta el momento. Sin embargo, la acción ha generado reacciones diversas, con algunos críticos considerándola como una intrusión inaceptable en el espacio cultural, mientras que otros reconocen la efectividad del grupo al llamar la atención sobre la seguridad alimentaria.

Este incidente insólito resalta la complejidad de los métodos de protesta en la actualidad y cómo los activistas buscan crear impacto visual para impulsar sus causas. Mientras la Mona Lisa permanece ilesa, la polémica generada por este acto continúa, cuestionando la relación entre el arte, la protesta y los límites de la expresión en el espacio público.

Las  activistas fueron identificadas como Sasha, de 24 años, y Marie Juliette, de 63. La cuenta en X de Riposte Alimentaire, que también compartió el video del momento en que arrojan sopa sobre la Mona Lisa, reveló por qué lo hicieron y qué hay detrás de esta protesta.
Donde escriben “A través de su acción no violenta, exigen el establecimiento de una Seguridad Social Alimentaria Sostenible. En Francia, una de cada tres personas se salta las comidas por falta de medios. Al mismo tiempo, se desecha el 20% de los alimentos producidos. Nuestro modelo estigmatiza a los más precarios y no respeta nuestro derecho fundamental a la alimentación”.