Andrés da la sorpresa.

Los que conocemos a Andrés González Palomera sabemos que es un tipo de trabajo y honesto, podemos contar cientos de anécdotas sobre cómo ayuda a la gente, su solidaridad y empatía son sus mayores cualidades, le importa la gente, son de esos políticos que quedan pocos, le toco ser político de la guardia de otra generación que enfrentó a un dinosaurio como Javier Bravo bailando con la más fea, pudo ser el mejor presidente de Vallarta y le tocó la suerte a Javier que terminó siendo el peor alcalde, de los que más deuda dejó y que se fue con más vergüenza y pena que gloria.

Después le tocó volver a sentarse, no era de los cariños de don Rafael Yerena, poco importó que fuera el más posicionado y aún contando con la amistad de Aristóteles tuvo que acceder, en ese tiempo Yerena era el poderoso hombre de La CTM.

Si me ayudas y te vas a otro partido para no ser candidato vas a ser mi amigo, pero si te quedas y me ayudas vas a ser más mi amigo: Jorge Aristóteles, y se quedó, fue amigo del gobernador y el gobernador fue su amigo, cerraron juntos un gobierno donde hicieron amigos y ayudaron hasta el último día de gobierno.

Andrés está listo para tomar una estafeta difícil, convertirse en el último samuray del PRI, en un intento de Liu chat contra los cacicazgos dentro y fuera, si logra por fin llegar será Historico.

Lograr quitar lo peor del PRI y regresar es una tarea difícil, pero Andrés es un ave de tempestades, hecho a la vieja escuela, amigo de los amigos como lo fue hasta su muerte de Aristóteles, si logra llegar tendremos asiento de primera fila para una batalla de antología, no se la pierda

Columna por César Langarica Santana.